Relaciones

¡Los pensamientos negativos pueden conducir a enfermedades de la mente!

¡Los pensamientos negativos pueden conducir a enfermedades de la mente!

¡Los pensamientos negativos pueden conducir a enfermedades de la mente!

¿Alguna vez te has centrado en la pequeña cantidad de negatividad de una situación e ignoraste todo lo positivo? Este es un caso común, no una excepción, y tiene una explicación científica. En base a esto, la tendencia hacia la negatividad puede ser comprendida y combatida. En este contexto, un informe publicado por New Trader U explicó una estrategia destinada a cambiar esta forma de pensar.

Comprender el sesgo negativo

El sesgo de negatividad es un principio psicológico que sugiere que es más probable que los humanos recuerden y se vean afectados por las experiencias negativas que por las positivas. Se puede ver en varios aspectos de nuestras vidas, desde la interacción con los demás hasta la percepción del mundo que nos rodea.

Y nuestros antepasados ​​necesitaban el sesgo negativo para sobrevivir. En tiempos prehistóricos, lidiar con peligros potenciales, como depredadores o amenazas de otras tribus, era una cuestión de vida o muerte. Por lo tanto, el cerebro humano evolucionó para priorizar estas experiencias negativas, ya que tenían importantes efectos de supervivencia.

Numerosos estudios científicos avalan la existencia del sesgo negativo y las investigaciones han demostrado que el cerebro reacciona con más fuerza a los estímulos nocivos.

El sesgo negativo afecta mucho las relaciones humanas, especialmente en lo que se refiere a críticas o desacuerdos que pueden eclipsar los aspectos positivos de las relaciones sociales.

El sesgo negativo también puede afectar la toma de decisiones y la evaluación de riesgos, lo que hace que una persona sea más cautelosa, lo que puede impedir que tome decisiones de toma de riesgos potencialmente beneficiosas.

La negatividad crónica puede preparar el escenario para problemas de salud mental como la ansiedad y la depresión. Cuanto más se enfoca una persona en los pensamientos negativos, más se alimenta la tendencia a los pensamientos negativos, creando un círculo vicioso que puede ser difícil de romper.

Un ciclo de pensamiento negativo es un ciclo de pensamientos y sentimientos negativos que pueden perpetuarse a sí mismos y ser difíciles de romper. El proceso a menudo comienza con un solo pensamiento o evento negativo. Por ejemplo, una persona podría cometer un simple error en el trabajo y, en lugar de reconocerlo como un error humano, comenzar a pensar negativamente sobre él y cuestionar su competencia o valor.

Estos pensamientos negativos desencadenan emociones negativas, como ansiedad o tristeza. A su vez, estos sentimientos conducen a pensamientos más negativos, creando un ciclo de retroalimentación sin fin. Cuanto más interactúa una persona con estos pensamientos negativos, más se refuerzan y parecen más reales.

Por ejemplo, si una persona está preocupada por una presentación en el trabajo, puede pensar que no se desempeñará correctamente. Este pensamiento puede provocar ansiedad, lo que lleva a pensamientos negativos como que la persona no es buena en su trabajo o que sus compañeros de trabajo no la aprobarán. Estos pensamientos y sentimientos pueden intensificarse, cada uno alimentando y exacerbando al otro, creando un ciclo de negatividad que es difícil de romper.

Este patrón puede afianzarse. También puede dar lugar a conductas de evitación, en las que la persona puede comenzar a evitar situaciones o tareas que la asocien con estos pensamientos y sentimientos negativos, lo que puede reforzar aún más el ciclo. En la mayoría de los casos, romper este ciclo requiere esfuerzos conscientes y estrategias como la TCC, la atención plena y el diálogo interno positivo.

Estrategias para superar el sesgo de negatividad

Reconocer el sesgo negativo es el primer paso para superarlo. Aquí hay algunas estrategias prácticas para superarlo:

Terapia cognitiva conductual: la terapia cognitiva conductual es un enfoque terapéutico que ayuda a las personas a desafiar y cambiar pensamientos, comportamientos y respuestas emocionales inútiles. La terapia cognitiva conductual puede ayudar a contrarrestar el sesgo de negatividad al cambiar nuestra percepción de los eventos negativos.

Atención plena y meditación: estas prácticas pueden ayudarnos a mantenernos presentes y evitar perdernos en pensamientos negativos, ya que fomentan la aceptación de nuestros sentimientos sin juzgar y promueven una perspectiva equilibrada.

Interacciones sociales positivas y mejora ambiental: Rodearse de personas y entornos positivos puede ayudar a mitigar el sesgo de negatividad. Las experiencias y emociones positivas, cuando se comparten, pueden actuar como un poderoso amortiguador contra la negatividad.

Ejercicio físico y estilo de vida saludable: El ejercicio regular y una dieta equilibrada pueden mejorar nuestro estado de ánimo y ayudarnos a mantener una actitud positiva.

Las predicciones del horóscopo de Maguy Farah para el año 2023

Ryan Jeque Mohamed

Editor en Jefe Adjunto y Jefe del Departamento de Relaciones, Licenciatura en Ingeniería Civil - Departamento de Topografía - Universidad de Tishreen Capacitado en autodesarrollo

Artículos relacionados

Ir al botón superior
Suscríbete ahora gratis con Ana Salwa Recibirás nuestras novedades primero, y te enviaremos una notificación de cada nueva لا نعم
Medios de Comunicación Social Publicar Auto Desarrollado por: XYZScripts.com