La televisión es una adicción.
La televisión es una adicción.
Ver televisión puede ser una fuente atractiva de necesidades emocionales e informativas.
La idea de que tecnologías, como la televisión, puedan considerarse adictivas de la misma forma que sustancias como la nicotina y el alcohol es controvertida. Sin embargo, muchos de nosotros pasamos demasiado tiempo viendo la televisión, más a menudo de lo que nos gustaría.
El principal atractivo de la televisión proviene de su capacidad para satisfacer muchas de nuestras necesidades psicológicas básicas de golpe y a bajo costo. Nos permiten cambiar nuestros sentimientos, aprender, saber lo que está pasando en el mundo y disfrutar de las llamadas relaciones "semisociales", con personajes ficticios, que pueden servir como amigos y familiares alternativos. Y todo ello desde la comodidad de tu sofá.