hombre de goma
Era algo apremiante ese hombre de goma, era algo con lluvia de canonjías de cuadros, facciones muy hinchadas, y un párpado marchito hasta el final de la vida. Fui consumido por todos los mares de luz, y brillaba hasta el último extremo.
Miedo a nadar en vano, no solo. Es absurdo ser liberado en una casa grabada en un recuerdo anhelante de juventud, tu cara igual, tu ropa igual, tu voz igual, y un fantasma ondeando como el aura de un ángel, y susurrándome, la patria. no es lo mismo. Tu cuello es suave, hasta que tu voz no vuelve a subir, y tu tristeza es amputada como un sinfín de historias. Me ramifiqué a treinta ramas secas en la flor de la primavera, y no encontré ni una gota de agua, como si una nube odiara mi presencia en un páramo desierto solitario.
Eras goma con la garganta cansada, tu amigo es un búho y una patria sigue en un remolino flotando en el aire imparable.
Tu mano es gomosa, nunca saludes.
Solo apoyado en un triste estante de tulipanes.